Del cinematógrafo y sus ancestros

(Un texto de Jesús Marchamalo en la revista Muy Interesante de julio de 2017)

El 28 de diciembre de 1895, en el parisino Salan lndien du Grand Café, los hermanos Lumière proyectaron ante un público atónito Lo salida de los obreros de lo fábrica, La llegada del tren a la estación de la Ciotat y otros cortometrajes. Era el nacimiento del cine como hoy lo conocemos, invento que los Lumiére registraron como cinématographe.

No era la primera vez que se intentaba crear la sensación de movimiento por medio de imágenes: antes estuvieron el fenaquistiscopio, el zoótropo, el estroboscopio, el zoopraxiscopio y el quinetoscopio. Este último era un proyector individual desarrollado en el taller de Thomas Alva Edison; si hubiera triunfado, hoy iríamos al quine en lugar de al cine.