Guerra a la piel de naranja

(Un texto leído en la revista Mujer de Hoy del 12 de abril de 2014, creo)

1. La exfoliación previa permite que los activos se absorban mejor, pero, además, activa la circulación sanguínea, lo que prepara la piel para recibir los beneficios de las cremas con mucha más rapidez.

2. El masaje es fundamental. Los adipocitos no están situados a nivel superficial, sino en la hipodermis, la capa más profunda de la piel. Para que los activos lleguen hasta ellos hay que activar la circulación linfática. Tienes que masajear la zona en profundidad mientras te aplicas el producto. Hazlo con movimientos circulares, de abajo arriba. Y si utilizas un producto con textura de aceite, […] aplícalo directamente tras la ducha, con la piel húmeda.

3. Hay que aplicarlas como mínimo dos veces al día. Y todos los días. Sé constante, es lo más importante de todo. Y no seas ruin: aplícate una buena cantidad de producto. A mayor cantidad, mejores resultados. Las formulaciones actuales consiguen texturas que poseen las cualidades cosméticas de un sérum.

4. El ejercicio mejora los resultados. Los activos drenantes y lipolíticos de las cremas contra la celulitis funcionan mucho mejor si realizas una actividad física justo después de aplicarla.

5. Recibir los activos a través de un tejido aumenta los beneficios. Penetran mejor y no se evaporan. Un paso más allá es la cosmética textil microencapsulada: los tejidos contienen los activos, que se liberan progresivamente en contacto con la piel.

6. Ten paciencia y espera tres meses. A los 30 días lo que te has quitado de encima suele ser solo agua. Para que se movilice la grasa tienes que esperar al menos tres meses, siendo realistas. Y si quieres que se mantenga, tienes que seguir dándotela después de haber logrados tus objetivos. Tus adipocitos no van a desaparecer y, una vez que dejas de usar la crema, tienen la mala costumbre de volver a su estado anterior, el acolchado estilo sofá chester.

EN LA MESA, GUERRA A LA PIEL DE NARANJA

La alimentación también cuenta. Y eso significa que necesitas incorporar a tu dieta verduras y hortalizas frescas y pescados azules con omega 3. Además de renunciar al azúcar, las grasas saturadas, los fritos y el alcohol. La buena noticia es que, si le quieres dar un empujoncito a la quema de grasas, cuentas con nutricosméticos de última generación.