Oktoberfest

(Un texto de Fernando Goitia en el XLSemanal del 14 de octubre de 2018)

Todo empezó con una boda real… El mayor evento mundial dedicado a la cerveza se celebra desde hace más de 200 años. Seis millones de personas se reúnen en Múnich, la capital bávara, en la mayor borrachera colectiva del planeta. En esta fiesta donde todo es excesivo ‘desaparecen’ unos ocho millones de litros de cerveza. La resaca, por supuesto, también es monumental.

La fiesta de todas las fiestas
El festival se celebra al oeste de la ciudad, en el Theresienwiese, un prado de 42 hectáreas donde se plantan 14 carpas, para 10.000 personas cada una, y otras 20 con capacidad para 3000. Con todos los hoteles a rebosar, el Oktoberfest da empleo a 13.000 personas, entre camareros, cocineros, feriantes, músicos, seguridad…

Unos bailes para abrir boca
La fiesta se desata en cuanto el alcalde abre el primer barril. Luego llega un desfile donde los hombres visten el tradicional lederhosen bávaro y bailes con música local.

La pureza de la cerveza
En las carpas solo se sirve cerveza de seis marcas locales, elaboradas bajo el estricto Reinheitsgebot, un edicto de 1516 sobre el modo en que debe fabricarse.

Todo empezó con un beso
La primera edición fue, en realidad, una boda. La del príncipe Ludwig con la princesa Teresa de Sajonia, en cuyo honor recibe su nombre el prado donde se celebra el festival.

Por poner algo en el estómago
Los asistentes se comen medio millón de pollos, 200.000 pares de salchichas de cerdo, unos 80.000 codillos, más de 120 bueyes, unos 60 terneros, pretzels para parar un tren…

El destino inevitable
Ocho millones de litros de cerveza solo pueden acabar en un lugar… Por eso se instalan mil inodoros, un kilómetro de urinarios y el consumo de agua en Múnich crece un 30 por ciento. Los hospitales, por cierto, atienden a una persona ebria cada 10 minutos.

Orgullo de ser bávara
El dirndl es el atuendo tradicional de las bávaras, popularizado por el Oktoberfest como símbolo de orgullo regional. El lazo del delantal indica el estado civil. A la derecha: «tengo pareja». A la izquierda: «soltera».

Una avalancha humana
Durante las dos semanas que dura la fiesta, la ciudad recibe a más de 6 millones de visitantes. Solo por comparar, Pamplona recibe en San-fermines a 1,4 millones.