Cincomarzada, siempre heroica Zaragoza
(Artículo escrito por Picos Laguna en el Heraldo de Aragón del 5 de marzo de 2017)
Desde 1838 celebramos que los zaragozanos echaron a los carlistas de una ciudad que creían desvalida. Y lo hicieron solos.
Qué se celebra
Se conmemora el heroico comportamiento de los zaragozanos durante el ataque carlista el 5 de marzo de 1838. «De cada balcón se precipitaban cuantos muebles y efectos podían causar daño; más allá sería una lluvia de tejas y cacharros que sepultaba a los fugitivos que se encontraban interceptando el paso con muebles, a cuyo abrigo se les hacían horribles descargas» (Diario Constitucional de Zaragoza. 11-3-1838),
Otra lucha admirable
Zaragoza era una ciudad liberal, pero su situación estratégica la hacía muy deseada por los carlistas. En la madrugada del 4 al 5 de marzo de 1838 más de 300 efectivos de caballería y hasta 1800 infantes entraron para tomar la ciudad. No contaban con el fervor de los zaragozanos, que salieron a la calle para defenderse. Los invasores huyeron, dejando 191 muertos y 800 prisioneros. Entre los zaragozanos, apenas 7 bajas.
Fiesta popular
Comenzó a celebrarse en 1839, aunque en 1843 el gobierno moderado la prohibió. Aun así, los zaragozanos siguieron saliendo a las calles recordando ese día. En 1868 se volvió a instaurar la festividad reuniéndose los zaragozanos para comer en espacios como La Almozara o la ribera del Ebro. La fiesta volvió a ser prohibida en 1937, hasta la llegada de la democracia volviendo a su carácter popular.
Recuerdos
Aún hoy se pueden ver recuerdos de la Cincomarzada en la ciudad, como en la calle Cinco de marzo ¡unto al paseo de la Independencia, o la calle Capitán Esponera cerca de la Puerta e iglesia del Carmen por donde entraron parte de las tropas carlistas. Desde hace años, se ha creado un postre para este día: masa de profiteroles con forma de '5' rellena de nata y decorada con chocolate azúcar glasé.
Zaragoza en ruinas
La de Zaragoza fue quizá la derrota más humillante para los carlistas. Los dos crueles Sitios napoleónicos, habían dejado la ciudad al borde de la desaparición: casi todos sus edificios estaban derruidos y la falta de ganadería y agricultura impedía la subsistencia. Solo el tesón de sus habitantes logró devolver la vida a la ciudad, pero tan lentamente que el 5 de marzo de 1838 todavía era una ciudad en ruinas, según Pedro Rújula, de la Universidad de Zaragoza.
'Muy leal'
Zaragoza ostenta seis títulos: 'Muy noble, 'Muy leal', 'Muy heroica', 'Siempre heroica', 'Muy benéfica' e 'Inmortal'. Los de 'Muy noble' y 'Muy heroica' fueron otorgados tras los Sitios napoleónicos. Y el de 'Siempre heroica', por la acción valiente de sus ciudadanos en la Cincomarzada. 'Muy benéfica', por la solidaridad en una epidemia de cólera en 1855, e 'inmortal', en el centenario de los Sitios.
Nacionalismos
El carlismo nació en la batalla por la sucesión al trono de España. Fernando VII, cercano a la muerte, promulgó en 1830 una pragmática sanción que derogaba la Ley de Sucesión (que beneficiaba a su hermano Carlos María Isidro, que habría heredado el trono) para asegurar la posición a su hija, la futura Isabel II. Los carlistas hicieron de la derrota y la nostalgia un discurso que alimentó los nacionalismos en España, según Pedro Rújula, profesor de Historia Contemporánea.
Etiquetas: Sin ir muy lejos, Tradiciones varias
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