Diez recetas para un pecho bonito

(Un artículo de B. Winckelmann en la revista Mujer de Hoy del 8 de mayo de 2010)

Es una de las zonas de nuestra anatomía que más delata el paso de los años, pero ¿es posible mantenerla joven? Ejercicio, buena alimentación, masajes... todo esto y mucho más puedes hacer para conservar un escote bonito y firme durante años.

1.- Ejercicio moldeador. Para hacerlo necesitas unas mancuernas de 1-2 kg. Túmbate boca arriba con las rodillas flexionadas y los pies planos sobre el suelo. Sujeta una mancuerna en cada mano y extiende los brazos hacia el techo. Flexiona los codos como si estuvieras abrazando algo. A continuación, inspira y abre los brazos hacia los lados manteniendo los codos flexionados. Espira mientras los vuelves a elevar a la posición inicial. Ahí es donde notarás el esfuerzo. Repite 15 veces.

2.- Gotas esenciales. Los aceites esenciales de plantas como la lavanda, el palo de rosa y las semillas de zanahoria, que están diluidos en una base oleosa (de 0,5 a 1%) son ideales para masajear la piel de los senos y ayudar a conservarla siempre joven.

3.- Un sujetador adecuado. Un buen sujetador es aquel que sujeta sin comprimir, se desecha en cuanto los tirantes empiezan a darse de sí y es el adecuado para cada situación, es decir, si vas a hacer deporte utiliza uno deportivo. Y otro consejo: no lo lleves puesto todo el día, no es bueno para la circulación ni para el sistema linfático.

4.- Depurar con margaritas. Esta flor, macerada en aceite, tiene fama de poder tonificar nuestra piel. Para aprovechar aún más esta propiedad, puedes emplear en la maceración aceite de argán.

5.- Agua que tonifica. Una buena hidratación es necesaria para mantener terso el tejido. Decirle adiós al salero también te ayudará a conseguir este objetivo. Otra costumbre para mantener el tono muscular es, al ducharte, alternar chorros de agua caliente y fría sobre el pecho.

6.- Aceites para la elasticidad. Lograrla es indispensable, ya que los senos son dos glándulas sujetadas por la piel y no por el músculo. Tus aliados: el aceite de argán, rico en vitamina E; la borraja, para la flexibilidad; la jojoba, que fija el agua y la rosa mosqueta, con efectos tensores. Estos aceites los puedes usar en masajes o compresas, diluidos al 20%.

7.- Masajes que revitalizan. Si los practicas a diario mejorarás el funcionamiento del sistema linfático. Primero, masajea la zona superior de las mamas hasta la barbilla. Utiliza ambas manos, con movimientos circulares y ascendentes. Después, desliza la mano derecha, presionando de la base del seno hacia la clavícula y haz lo mismo en el otro seno.

8.- Cartílago para la firmeza. ¿Dónde encontrar el colágeno para mantener un aspecto firme? Pues incorporando a tu dieta peces con huesos cartilaginosos, como el cazón o la raya, o consumiendo manitas de cerdo o de cordero, callos y oreja.   

9.- Algas para la densidad. La Padina pavonica es un alga mediterránea cuyo extracto, en crema, ayuda a la síntesis del colágeno. Además, tiene propiedades antienvejecimiento, antiarrugas y aumenta la hidratación de la zona un 10% en tan sólo 15 días. 

10.- Mijo que fortalece. El silicio es un mineral que participa en la reparación de las fibras de elastina y colágeno Lo puedes encontrar en el mijo, un cereal que puedes buscar en las tiendas de productos biológicos donde lo verás como grano sin cáscara, sémola o copos.