Naturaleza salvaje en California

(Un texto de Ixone Díaz en la revista Mujer de Hoy del 17 de julio de 2010)

 Caminar sobre dunas, pasear entre árboles gigantes y ver osos en libertad es posible en un solo viaje. Los parques nacionales de California son el sueño de los amantes de la naturaleza. 

Este "road trip" por los parques naturales de California arranca en el mítico Yosemite, hace escala en Secuoya y termina en el Valle de la Muerte, uno de los paisajes más extraños y bellos de la Tierra. Prepárate para disfrutar de la naturaleza y recuerda que todos los parques tienen zonas de acampada.

Acantilados de granito, cascadas, bosques, glaciares... Yosemite es un destino soñado. Hay que visitar la cascada de Bridalveil y llegar al pie de El Capitán, una pared vertical de 900 m que desafía a los mejores escaladores. También se puede hacer rafting en el río Merced y ver los bosques de secuoyas de Mariposa, al sur del recinto. Pero lo que hace especial al parque es su fauna. En ningún sitio es tan fácil encontrarse con un oso como aquí. Pero cuidado: no son nada tímidos. No dejes comida a la vista, porque pueden hasta abrir los coches para zamparse el picnic de los desprevenidos turistas. Más info.: www.nps.gov/yose.

En los bosques del Parque Nacional de Secuoya está el árbol más grande del mundo: el general Sherman. Muchos turistas sólo llegan hasta ahí y se pierden el verdadero tesoro del parque: el Bosque Gigante. Sentirse diminuto paseando entre sus árboles es toda una experiencia. Los "rangers" te explicarán que el fuego es amigo de las secuoyas: mata la maleza y permite que sigan creciendo. Por eso, muchas están quemadas. Los amantes de la espeleología deben visitar Crystal Cove y los del senderismo, hacer una excursión de medio día a las cascadas de Mist Falls, bordeando el Kings Canyon. Más info.: www.nps.gov/seki.

Una explosiva mezcla de actividad volcánica, sísmica y glacial dio lugar al Valle de la Muerte. Hoy, esta joya geológica es un desierto de paisajes más lunares que terrestres: Badwater -un lago de cristales de sal bajo el nivel del mar-, el cráter de Ubehebe o Zabriskie point y sus rocas multicolores. Ver el amanecer desde Dante's view, a 1.700 m de altura, y el atardecer desde las dunas justifican la visita. También hay pueblos fantasmas como Rhyolite. Al lado, un museo de esculturas al aire libre muy ''kitsch'' que merece una foto. El nombre del parque no es casual. Las altas temperaturas han costado la vida a algún turista. Más info.: www.nps.gov/deva.