Sexo, flirteos y unos cuantos números

(Leído en un artículo publicado en el dominical de El Periódico hace ya varios meses. No sé de quién es.)

“En alguna parte hay 1,52 millones de parejas perfectas esperando conocerle". Lo prometen, con estadísticas en mano, los investigadores best seller Allan y Barbara Pease. Cualquier enamoradizo potencial tiene química con una de cada 50 personas del sexo opuesto (sin contar asesinos, enajenados y demás parejas no deseables). Una legión de príncipes y princesas azules que se destapan en verano con la misma parsimonia que una lata de berberechos. Clac. 

[…]Marcapaquetes, pelo en pecho, cadena de oro a juego con la cerveza, barriguita contenida (contenida por la respiración). Estilismo playero del amante ibérico (hay que añadir la entonación naturalista de Félix Rodríguez de la Fuente). Una especie en peligro de extinción, según las estadísticas. Asesinó al mito un ranking de la promiscuidad (los hay, los hay). En la liga del sexo casual, España está a la cola (qué paradoja). Ocupa el puesto 13 de 15 países. El podio se lo reparten Inglaterra, Alemania y Holanda. La Federación Española de Sociedades de Sexología terminó de rematar al macho-alfa fogoso: el 77% de los españoles -concluyó el estudio sobre hábitos sexuales en España- planifican sus sesiones de cama. Se reafirma el dicho: ganan por goleada doméstica los sábados-sabadetes porla noche. 

Verano y sexo. Lo combinan más de dos millones y medio de entradas en Google. En Internet se multiplican los kamasutras estivales y los decálogos para aprender a ligar. Suben la temperatura, el apetito sexual y los cuernos (calculan que uno de cada cuatro españoles es infiel). Hasta el remate  veraniego con cantinela del Dúo Dinámico: "El final del verano llegó y tú partirás". Los matrimonios se derriten a 40 grados. Uno de cada tres divorcios se produce tras las vacaciones.

La dieta del cucurucho. Comer poco y poner en práctica el pareado. La dieta estrella del verano: los cucuruchos del día se queman con los cucuruchos de la noche. Un régimen eficaz: una sesión de sexo puede quemar entre 100 y 250 calorías. Además, alivia el estrés y libera endorfinas (el ibuprofeno del organismo). Lo que desmonta la excusa de mesilla: el sexo calma los dolores de cabeza. 

Otro contrasentido de alcoba: la mayoría de los españoles fantasean con que les agüen el plan. La fantasía favorita del verano 2010 -encuesta anual de la web sexología.net- es hacer el amor en el agua. El imaginario sexual se completa con un trío y un revolcón con un desconocido. 

Los sondeos aligeran la ropa El número de estudios sexuales de verano es directamente proporcional a la intención de los encuestados de ponerlos en práctica. Vendría a ser algo así como un tantra sexual. Y la manera más sencilla de darle a la lengua.

Los sondeox (con clasificación x) hasta han puesto coordenadas al sexo estival: Ibiza y Mallorca. Son los destinos donde los españoles creen que es más fácil que fructifiquen los calentones veraniegos. Cuidado con el sexo arenoso. Los voyeurs ahora incluyen pack YouTube. Hay más de 200.000 webs que ofrecen vídeos porno robados. 

Cómo se calcula. El instinto sexual. Truco científico para adivinar de un vistazo el apetito sexual de una pareja potencial. Quiromancia erótica. Sólo hay que fijarse en la diferencia de longitud entre el dedo índice y el anular, señala el libro Por qué los hombres quieren sexo y las mujeres necesitan amor. Por norma general, los hombres suelen tener el anular más largo; las mujeres, el índice. La diferencia digital la marca el nivel de testosterona (responsable del apetito sexual): es más alto cuanto más largo es el dedo anular.

La regla del 9%. Consejo matemático para no perder el tiempo buscando medias naranjas veraniegas. La regla del 9%. Es decir: si se asiste a una fiesta con 100 parejas posibles, sólo hay .que analizar a las primeras 9 personas que se encuentren al azar antes de elegir. Es la conclusión a la que llegaron los psicólogos Peter Todd (Indiana University) y Geoffrey Miller (Universidad de Nuevo México). "Examinar menos del 9% implica que no dispondrá de suficiente información para tomar una buena decisión – añaden los investigadores Allan y Barbara Pease-. Examinar a más personas puede hacer que le pase por alto una buena elección". 

La mejor frase para ligar. La panacea de los Casanovas. Del "¿estudias o trabajas?" al "¿estudias o te trabajo?". Frases de impacto para seducir a una mujer. En la mayoría de los casos, se quedan en un simple impacto (con derribo).

30 segundos. Es el tiempo exacto que tiene un hombre para impresionar (o deprimir) a una mujer, según los cálculos del psicólogo Richard Wiseman. (En los encuentros rápidos, ellas suelen tardar menos que ellos en decidirse). Internet no ayuda. Las frases que más se repiten en las webs de autoayuda como mucho permiten combatir los calores: dejan a las mujeres heladas. 

"¿Aquí hace calor o eres tú?". "Perdí mi número de teléfono, ¿me puedes dar el tuyo?". "¿Crees en el amor a primera vista o tengo que volver a pasar delante tuyo?". "Hola, me llamo Felipe, recuérdalo bien porque estarás gritando mi nombre dentro de unos minutos". No funcionan las frases desgastadas ("¿vienes mucho por aquí?"), ni los cumplidos ("eres la mujer de mis sueños"), ni las apelaciones directas al sexo ("mañana me meto en un convento"). Lo han demostrado un buen número de experimentos sociológicos. Wiseman, en concreto, ha encontrado experimentalmente la mejor frase para ligar, según detalla en su tratado de Rarología. El macroestudio se basa en citas rápidas a gran escala (100 participantes, 1.500 páginas de datos). La frase masculina más puntuada fue: "Si participaras en Lluvia de estrellas, ¿quién te gustaría ser?". La pregunta femenina más memorable: "Si fueras la cobertura de una pizza, ¿qué querrías ser?". La justificación de Wiseman: estas preguntas, dice, provocan una "experiencia graciosa compartida", lo que produce una "sensación de cercanía y atracción".

El humor es una de las dos "características clave que motivan a las mujeres a hacer el amor", confirman David Buss, profesor de Psicología de la Universidad de Austin, y Cindy Meston, directora del Laboratorio de Psicofisiología Sexual de la Universidad de Texas, en el libro Why women have sex: Los secretos de la sexualidad femenina. La otra característica clave es la seguridad en uno mismo.

En qué piensan las mujeres. Las mujeres quieren besos a lo Carbonero. Los hombres, que les saquen de sus casillas. Regla de tres para golear en las distancias cortas. El número de orgasmos femeninos aumenta cuando ellos mencionan la palabra amor, aseguran los Pease. Lo que excita a una mujer (conclusión de 23 experimentos, recopilados en el libro Por qué los hombres no se enteran y las mujeres siempre necesitan más zapatos). Por orden de prioridad: cuerpo atlético, hombros anchos, trasero pequeño, cabello completo, boca sensual, ojos agradables, nariz y barbilla potentes, caderas estrechas, vientre plano y, en 10º lugar, un pene grande. El dicho se mantiene en el imaginario femenino: el tamaño sí importa. Aunque las féminas valoran más la anchura (en un estudio de la Universidad de Texas, 45 de las 50 universitarias encuestadas aseguraron que es más importante que los centímetros de los que se suele presumir).

Lo que excita a un hombre: cuerpo atlético, boca sensual, pecho voluminoso, piernas largas, cintura estrecha, nalgas redondeadas, ojos atractivos, melena larga, nariz pequeña, vientre plano. No es sólo belleza. Es una droga. "Unos investigadores del cerebro del Massachusetts General Hospital-explican los Pease- mostraron fotografías de mujeres bellas a hombres heterosexuales y descubrieron que dichas imágenes activaban las mismas partes del cerebro que activan la cocaína y el dinero".

 

Corazonadas. Siguiente paso del manual básico de la atracción veraniega: el corazón se acelera. Dos profesores de psicología se preguntaron si se produciría al revés. Es decir: si se acelera el corazón, ¿uno está más predispuesto a encontrar atractivo a alguien?

Donald Dutton y Arthur Aron pusieron a prueba su corazonada sobre dos puentes (uno colgante, a más de 60 metros sobre las rocas; otro más bajo y sólido). Una supuesta investigadora se puso a abordar a hombres para que completaran un supuesto cuestionario. Al final, les ofrecía su teléfono por si querían saber algo más acerca de su trabajo. Resultado: llamaron más hombres del puente más alto (a los que la precaria caminata les había acelerado el corazón). 

Inconscientemente, atribuían a la encuestadora el aumento de su ritmo cardiaco, explica Wiseman en su Rarología. "En consecuencia, sus cuerpos engañaron a sus cerebros para que pensasen que la hallaban atractiva". Conclusión con consejo añadido para ligar: "Cuando quieras que una persona se enamore de ti –explica Wiseman- algunos expertos creen que tú y tu cita debéis evitar la suave música newage, caminar por el campo y escuchar carillones. Tus posibilidades de éxito pueden incrementarse yendo a un concierto de rock, a la montaña rusa o viendo una película de terror".

 

Sexo 2.0. Advertencia a pie de cama. Cuidado con las potenciales parejas adictas a Facebook y Twitter. Ir por la vida pegado a un iPhone puede significar una marcha atrás. Literalmente. En una encuesta de la firma Retrevo, el 7% de los encuestados confesaron haber chequeado sus mensajes mientras practicaban sexo.