Botiquín verde
(Un texto de Claudia Lafont en la revista Mujer de Hoy del 7 de agosto de 2010)
Levantar el ánimo, combatir el insomnio... hay muchas plantas dispuestas a ayudarte en tus problemas de salud. Y sin sufrir efectos secundarios.
Utilizar las virtudes de las plantas adecuadas puede solucionar problemas como la ansiedad, el insomnio, el dolor de cabeza, una indigestión, etc. Sin embargo, la primera indicación a la hora de recurrir a ellas es que hay que ser precavidos y obtener estos productos en establecimientos que ofrezcan garantía. Concha Navarro, catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada y presidenta de INFITO (Centro de Investigación sobre Fitoterapia), recuerda que la Ley del Medicamento "establece que la dispensación de medicamentos sólo se puede hacer en la oficina de farmacia, y eso es válido tanto para preparados de origen sintético como natural". Tampoco hay que olvidar que el farmacéutico conoce la fitoterapia, porque la ha estudiado en su carrera, y puede aconsejar sobre el tratamiento más adecuado para cada persona, así como señalar interacciones.
¿En qué te ayudan? Por ejemplo, para algo tan deseado como la pérdida de peso. "Hay personas que requieren reducir el apetito, para lo que tenemos la Garcinia cambogia. A otras les conviene tener una sensación de saciedad, para lo que ayuda el glucomanano y el fucus; hay personas a las que se les aconseja camilina, por su capacidad para elevar el gasto calórico. También hay plantas que colaboran en el tránsito intestinal, en la diuresis, y en la depuración hepática", señala Teresa Ortega, profesora de Farmacología y vicepresidenta de INFITO.
Otro de los males comunes es el insomnio. Y la medicina natural también tiene remedio para ello. De hecho, se calcula que más de tres millones de españoles consumen plantas medicinales para conciliar el sueño. Este trastorno del sueño junto con las enfermedades ligadas al sistema nervioso central, suponen más de la mitad de los problemas de salud de los consumidores habituales de fitoterapia (un tercio de la población). Según Ortega, hay tres plantas que especial-mente útiles para estos trastornos: "La amapola de California, ya que es eficaz para aliviar la ansiedad; la pasiflora, porque prolonga las fases del sueño profundo y evita los despertares nocturnos, y la valeriana, que favorece el sueño". Y si bien la fitoterapia ha demostrado beneficios en muchas afecciones, en cuanto a fotoprotección se refiere es importante que la combinemos con los productos convencionales o filtros solares de síntesis adecuados a nuestro fototipo. Los filtros solares son sustancias capaces de proteger la piel de las radiaciones UVA, UVB e incluso de la radiación infrarroja. En función de su naturaleza, estos filtros pueden ser físicos (reflejan y dispersan la radiación solar) o químicos (absorben la radiación solar). Los químicos pueden ser sintéticos o de origen vegetal.
Protección solar. "Las plantas que se pueden utilizar como filtros solares tienen la capacidad de absorber diferentes radiaciones, pero se deben combinar con otros filtros solares de síntesis para garantizar una fotoprotección segura y ofrecer un producto realmente eficaz en la protección solar", explica Cristina Tiemblo, vocal nacional de Dermofarmacia del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos. "Hay algunas sustancias naturales derivadas de ciertas especies vegetales, que potencian la acción del filtro solar. Entre ellas podemos citar aceites como el del aguacate, el de sésamo o el del aloe vera", añade.
De todos modos, así como los derivados de las plantas no son buenos fotoprotectores por sí solos, sí que podemos encontrar una amplia gama de productos elaborados con extractos vegetales con propiedades hidratantes, emolientes y refrescantes, ideales para después del sol. Por ejemplo, podemos utilizar extractos vegetales que alivian la inflamación producida por el eritema postsolar (aloe vera, Calendula officinalis, Malva silvestris...); con acción epitelizante (Centella asiática, Calendula officinalis, Echinacea angustifolia, Hypericum perforatum...) o con virtudes refrescantes (Tilia cordata, Matricaria chamomilla...).
Una planta para cada ocasión
Trastornos digestivos
ACIDEZ: alga carotina o manzanilla.
GASES: hinojo y anís.
ESTREÑIMIENTO: cáscara sagrada.
NÁUSEAS O PÉRDIDA DE APETITO: jengibre.
Insomnio o nerviosismo
DEPRESIÓN O IRRITABILIDAD: hipérico.
ANSIEDAD: pasiflora, valeriana y amapola de California.
INSOMNIO: pasiflora y espino albar.
Problemas femeninos
ARRUGAS: aceite de borraja.
OSTEOPOROSIS: bambú.
SOFOCOS: soja.
SÍNDROME PREMENSTRUAL: aceite de onagra.
Otros trastornos
VÉRTIGOS: arándano o ginkgo biloba.
MEMORIA: ginkgo biloba.
DOLOR DE GARGANTA: sauce.
RINITIS ALÉRGICA: eucalipto.
Para ir de viaje:
CORTEZA DE SAUCE: se ha utilizado desde tiempos inmemoriales contra el dolor muscular y de cabeza. De hecho, la aspirina lo contiene en su composición.
ALOE VERA: es rico en vitaminas, minerales, polisacáridos, aminoácidos, ácidos grasos y otras sustancias que lo hacen apto como calmante contra las quemaduras leves, irritaciones de la piel, gastritis o flatulencias. CALÉNDULA: posee aceites esenciales, flavonoides, saponinas, mucílagos y otras sustancias como la calendina, con poder antiinflamatorio, cicatrizante y antiséptica.
JENGIBRE: es un estimulante digestivo, carminativo, circulatorio, antiinflamatorio, laxante, expectorante, antiséptico y analgésico. Al ayudar a la circulación periférica, puede utilizarse en viajes transoceánicos para combatir el síndrome de la clase turista. Y es un buen remedio contra los mareos.
EQUINÁCEA: potencia el sistema inmunitario. Muy útil cuando se viaje a un país con clima frío.
Fuente: Dr. Bernat Vanaclocha, médico especialista en fitoterapia.
Etiquetas: Pensando en la salud, Sobre plantas y bichos
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home